Llega el verano y la mayoría queremos irnos de vacaciones a las zonas costeras buscando disfrutar de todos los beneficios que nos aporta la playa.
La pregunta es qué sucede con todas aquellas personas que presentan alopecia y que usan una peluca o una prótesis capilar. Claro está, querrán bañarse en el mar y os aseguramos que no existe incoveniente alguno.
Ya sabemos lo que estáis pensando. Meterme en el agua, con la fuerza de las olas. Hay que estar loco para hacerlo porque la pieza o se nos cae o, al menos, se nos mueve. Imagina el ridículo.
De entrada, borra este pensamiento porque os aseguramos que no se ajusta a la realidad y lo podéis comprobar en el vídeo que incluye este post con una de nuestras clientas.
Se trata de un caso de Alopecia Frontal Fibrosante (AFF) y la prueba la hemos testado en una piscina simulando situaciones que ponen a prueba esta afirmación que acabamos de realizar.
Nuestra clienta se puede tirar de cabeza, bucear con total normalidad, sumergirse y salir del agua con brusquedad y mover la cabeza dando tirones. Y la prótesis capilar que lleva sigue en su sitio.
Si te bañas en una piscina particular, donde los demás bañistas conocen tu alopecia y que usas una pieza capilar, la intranquilidad apenas existe. Al fin y al cabo, se trata de tu círculo más cercano.
Pero si hablamos de una piscina comunitaria y, sobre todo, la playa, no vas a querer que te suceda un imprevisto por nada del mundo. Ya sabes que la solución a tu problema existe y ahora te contamos cómo lo conseguimos.
Partimos de la base de que la peluca o la prótesis capilar que usas es la adecuada para tu vida diaria. Es decir, que cuando vas por la calle, la sensación de naturalidad es un hecho.
De lo contrario, estaríamos hablando de que la pieza no es de la calidad estimada, que los adhesivos no son los correctos y que, en definitiva, este nuevo cabello no forma parte de ti, no está integrado.
A esto, le tenemos que añadir que vamos a someter a la pieza a una situación de estrés muy importante. Si supera esta prueba, puedes estar contento porque la alopecia dejará ser un problema.
Estamos hablando de bañarte en la playa pero, además, no debemos olvidarnos del viento, a veces, importante, que corre en el paseo marítimo cuando paseas por la tarde o la noche.
Nuestra recomendación es muy clara. Asegúrate que tu peluca o prótesis capilar, en función de la alopecia que presentes, sea de calidad, que se trate de una pieza que puedas tener la certeza que no te va a fallar.
Y luego es fundamental que uses unos adhesivos especiales para la pieza que uses. Al igual que sucede con ésta, no debemos escatimar en aquello que va a hacer que mi pieza esté perfectamente sujeta.
La otra opción es estar en la playa con el temor de que en cualquier momento puede suceder el desastre. Son muchos años de experiencia y os podemos asegurar que no existen los milagros. Unos adhesivos inadecuados garantizan pasar un mal rato.
Todo ello genera otro problema añadido. Los adhesivos y los productos de higiene de baja calidad pueden provocar irritación en la piel o que se reseque el pelo.
Sí tenemos que advertir que la vida útil de una peluca de cabello natural será mayor mientras más la cuidemos. Esto quiere decir que podemos bañarnos y tomar el sol pero que un uso reiterado en el agua y una excesiva exposición de la peluca al sol originará que ésta se deteriore antes de lo que quisiéramos.
En el centro Carmen Olmedo, disponemos de todos los productos de máxima calidad y os explicamos de manera detallada todo aquello que es necesario para que podáis pasar unas vacaciones y un verano tal como os merecéis.
Y recordad. Cuando un problema no tiene una solución clara, tenemos resignarnos. Pero cuando sí existe, como es el caso de bañarse con pelucas o con prótesis capilar, sólo nos queda aprovecharla y disfrutar de lo que más nos hace feliz.